ESTADO PURO PALACIO DE TEPA REINVENTA EL VODKA TONIC
La joven barwoman Dana Moreno ha diseñado hasta nueve perfect serves del que se perfila como el nuevo combinado de moda: el vodka tonic
Es el destilado preferido por las celebrities pero también por los más prestigiosos barmen del mundo por “el reto que presenta su cata” a sus expertos paladares. El vodka viene pisando fuerte y, a diferencia de la creencia popular, “presenta una gran riqueza de aromas según su procedencia, pureza e ingredientes con los que se destila”. Así lo explica Dana Moreno, barwoman de Estado Puro Palacio de Tepa, que adelantándose a las tendencias ha diseñado nueve vodka tonics diferentes con vodkas Premium de diversos países productores: Rusia, Polonia, Holanda, Francia y Suecia.
Por la suavidad de la tónica, que no tapa los matices del destilado y refresca y prepara el paladar para apreciar sus cualidades ocultas, el vodka tonic es para Dana la mejor manera de degustar este destilado. Pero, al igual que con la ginebra, cada marca exige su particular perfect serve. La coctelera maestra del gastrobar del NH Palacio de Tepa ha sido en nuestro país la pionera en estudiar el alma y lenguaje organoléptico de los vodkas más especiales del mundo, para potenciar esos tímidos sabores y aromas que presenta cada una de las referencias.
Así, el ruso Imperial, un vodka que sabe y recuerda a su país de origen, se sirve con un topping de la pequeña calabaza rusa potison (muy difícil de encontrar en Madrid) y se aromatiza con Schweppes de pimienta rosa, mientras que Cîroc, el único destilado a partir de uvas blancas francesas, se presenta con una brocheta de uvas blancas y negras en el vaso. El holandés Vox, extremadamente floral, se decora con una espiral de naranja y una pipeta de agua de azahar para aromatizar el combinado al gusto del cliente y Citadelle, goloso, cítrico y floral, lleva miel de vainilla y naranja, canela y Schweppes de azahar y lavanda. Ketel One se sirve con hielo de sandia y menta, Zuidam con hielo de mango y flor de pensamiento, Purity con manzana verde y lemon grass, Uluvka con pepino y ginger beer y Grey Goose con espiral de pomelo y lychhes y tónica de cardamomo y ginger.
En total, nueve vodka tonics exclusivos de Estado Puro Palacio de Tepa que se ofrecen en vaso de vidrio artesano por un precio de entre 9 y 14 € y con los que Dana se propone abrir la mente y el paladar del público madrileño.
Y es que, con experiencia como ideóloga de bares temáticos en su Argentina natal, en los que combinaba la gastronomía japonesa con las múltiples posibilidades del sake o la cocina hawaiana con su coctelería Tiki, Dana pretende romper, desde la barra que ahora gobierna, “con la imagen de la mixología como el gin tonic y el mojito”. Y lo hace a través de una variada oferta en la que no faltan los clásicos de diferentes épocas y procedencias ni su revisión al estilo de Estado Puro así como creaciones contemporáneas con las más modernas técnicas: hielos saborizados, espumas o aires, eso si, utilizando siempre siropes y productos 100% naturales.